Al cobijo de la
nada
Buscado aquel
refugio del pasado
contemplo que la
nada me consuela,
que apenas queda
tiempo entre las sombras,
que el Sol que me
calienta en la mañana
se pierde sin
refugio que me aguarde.
Buscando aquel
refugio del pasado
me adentro en la
espesura de la noche,
temiendo la mirada
de la Luna,
temiendo que los fríos
me den cobijo
temiendo que la
nada nos desuna.
Buscando aquel
refugio del pasado
me dejo acariciar
por la penumbra,
me amparo tras los
besos de la Luna
y encuentro al
desamparo de la noche
cobijos que vestido
con la plata
me acunan y me
piden que no dude.
Buscando aquel
refugio del pasado
encuentro entre la
nada de la noche
el todo que
calienta mis temores,
el beso de los
fríos atardeceres
que encuentran al
cobijo del pasado
la nada que me
llena tras el todo.
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